Mi acercamiento a la Filosofía Pedagógica de la Reggio Emilia. | Prof. Stella Maris Velazco

Una reseña histórica…

Desde los inicios de la actividad educativa en Arcoiris con el Jardín Maternal y de Infantes, los lenguajes artísticos, las inteligencias múltiples, los derechos del niño y su protagonismo fueron el punto de partida de nuestro accionar.
Muchas jornadas de estudio, reflexión y capacitación en servicio acompañaron la cotidianeidad pedagógica como savia conductora de nuestros proyectos y diseños educativos.
Prestigiosos profesores visitaron nuestros lugares y desarrollaron espacios de encuentro e intercambios de propuestas.
Desde Lilia F. De Menegazzo, María Cristina Grillo, María Victoria Peralta, Mónica Díaz Leal, Marcela Ramírez, Mariana Talamonti, Ximena Gafaro, Alejandra Dubosky, Mariana Gigena y muchos más.
Participación en mucho eventos con la Red Solare, de Reggio Children con Francesco Tonucci y múltiples eventos que nutrieron a Arcoiris y a su comunidad educativa de la inspiración reggiana para el contexto de nuestra ciudad y nuestras instituciones.
Lo central fue mi viaje a la ciudad de la Reggio Emilia en febrero del año 2007. Lo comparto como prólogo de estos documentos; que será nuestra revista base de nuestros primeros treinta años. Visitar la ciudad y sus escuelas es una experiencia vital, transversal sobre la importancia de la Primera Infancia para el desarrollo de los pueblos pero desde una cosmovisión humanizadora y diferente de lo proclamado hasta la actualidad. Es una mirada centrada en el niño – niña desde bebé validando la existencia del Maternal (nidos en Italia) como complemento de la crianza a las familias pero reconociendo el valor de la tribu (grupo socio cultural en el que ha nacido y en que habita).

Visitar Reggio fue una experiencia tan visceral, tan fuerte que validó y justificó mis ansias de seguir desarrollando mi visión educativa a través de las instituciones escolares.

Ver y sentir Reggio sintetiza el emblema de la utopía como sentido losó co de mi ser pedagógico y se transforma en una fuerza motivadora que transforma los límites coyunturales, humanos, reales, locales. También desarrolla una fuerte capacidad para enfrentar fracasos… Es una fuerte decisión política de ver la educación como una inversión, de concebir la calidad más allá del constructo colectivo de éxito o competencia ya que concibe la educación como procesos de aprendizajes en una búsqueda permanente de sentido.

Para eso se vuelven imprescindibles la reflexión y la discusión en esa búsqueda analizando las instituciones, sus significados y sus entornos. La educación se convierte en diseñar y re-dise- ñar instrumentos y recursos para los procesos de aprendizaje teniendo al niño y sus familias en el centro de la escena pedagógica.

Reggio no es un método, es una aventura existencial de trabajar para los niños / niñas y el futuro de la humanidad; fortaleciendo la esperanza para construir formas diversas de hacer y ser.

 

 

 

 

¿Quién fue Loris Malaguzzi?

Mi nombre es Antonela Serrano y durante los días 1, 2, 3, 6 y 7 de julio participé de un seminario online titulado “Loris Malaguzzi y las escuelas de Reggio Emilia. Historia y contemporaneidad de la experiencia educativa reggiana” a cargo de maestros, pedagogos y atelieristas de las escuelas Reggio Emilia y Reggio Children.

Los cinco encuentros temáticos están relacionados entre ellos y tratan los aspectos más sobresalientes del Proyecto educativo de Reggio Emilia: los 100 lenguajes del niño, la función del atelier, el rol del atelierista, la dimensión estética educativa del entorno, el ambiente como activador, la documentación pedagógica que hace visibles los procesos de aprendizaje y la continuidad educativa entre la etapa de infantil y primaria.

El primer encuentro dedicado al pedagogo Loris Malaguzzi estuvo a cargo de Marina Castagnetti, maestra de la escuela Diana de Reggio Emilia, formadora de Reggio Children y colaboradora de los archivos de Loris junto a él.

Loris Malaguzzi (1920-1994) fue un maestro, pedagogo, iniciador e inspirador de la metodología educativa de las escuelas infantiles de Reggio Emilia; trabajó con gran dedicación en la construcción de una experiencia de calidad educativa distinta a lo que se conocía hasta el momento.

La innovación educativa, social y política es eldistintivo de la obra de Malaguzzi. Es una innovación concreta, demostrable con la intención de transformarnos hacia una sociedad con mayor equidad, participación y protagonismo por parte de todos; pero, sobre todo, dando identidad, voz y derecho de palabra a todos los sujetos que forman parte de la relación educativa (niños– familia y educadores); una idea muy potente que fue abriendo caminos: el derecho a tener derechos connota la dignidad del ser humano, la dimensión de la igualdad y la democracia. Loris logra que se respeten estos derechos en la cotidianidad de la escuela, y, con la presencia de múltiples lenguajes, introduce el derecho a la subjetividad en la sociedad.

“La cultura de la subjetividad es algo muy distinto. La subjetividad la relacionamos, al fin, directamente, con un derecho de carácter biológico y cultural: significa un reconocimiento de acreditar recursos, de un fuerte dinamismo evolutivo que concedemos, que reconocemos que está presente en todos los niños.

Reconocimiento de un derecho de competencia; hay quien habla de la competencia de los niños como un hecho ingenuo, como de una ingenuidad, pero creo que el problema de des- cubrir las competencias de los niños es uno de los máximos descubrimientos, el descubrimiento más productivo, más prolífico que quizás se haya hecho jamás respecto a temas de subjetividad, de derechos, etc.

Reconocimiento por parte de los niños de entrar activamente en la vida, lo que hace el niño es una entrada activa.

Acreditar al niño capacidades interactivas, de reciprocidad relacional, de constructividad de inteligencias, de constructividad de conjeturas, de constructividad también de elementos de evaluación de las conjeturas y de las cosas que salen de sus manos y de su mente, de arreglos, sin duda, y de creaciones también transgresivas, de negociar con las cosas, con las ideas, con los demás. Estamos diciendo cosas que realmente pertenecen a los niños.”

El descubrimiento de las competencias del niño abre la reflexión hacia la transformación de la educación: en el año 1981, Malaguzzi realizó la exposición “El ojo sí salta el muro”, esta muestra recorrió varios países y fue el primer acto concreto en dar visibilidad para reconocer, comunicar y compartir su imagen de un niño competente.

Durante esa exposición logró generar vínculo con políticos importantes con la intención de invitarlos a conocer su proyecto y que tomen conciencia de la necesidad de invertir en una educación de calidad para los niños. Fue a partir de esta muestra que nace la teoría de Los 100 lenguajes del niño.

A partir del pensamiento de Loris Malaguzzi se visualizan tres núcleos que articulan las relaciones educativas entre educadores y niños: el paradigma de la complejidad, la centralidad de las preguntas y el pensamiento crítico. Estos núcleos importantes siguen actualizando y vitalizando la educación infantil en los diferentes contextos de las escuelas.

Es una perspectiva de la cual se parte para seguir investigando las múltiples culturas, los múltiples ambientes desde un punto de vista antropológico. Una perspectiva a partir de la cual seguir observando y sintiendo a las personas en relación con otros seres vivos: un enfoque ecológico hacia el mundo, hacia todo lo que es vivo. Es un contacto directo que busca el significado de las cosas y los significados de los contextos culturales en una circularidad continua entre todas las partes que busca la evolución y la transformación.

Es un respeto de las diferencias, de los distintos puntos de vista que nos hace defender el derecho a la competencia tanto de niños como de adultos para participar en esta construcción de la cultura y compartirla.

Este enfoque ecológico revela su visión planetaria:

“Un mundo hecho en red es un mundo que comunica aún sin quererlo, es un mundo que tiene el mismo destino incluso si se buscan destinos parciales y distintos, es un mundo donde las creencias, los antiguos y nuevos fundamentalismos, tal vez volverán, no se sabe cómo ni de qué manera, no sabemos cómo la historia resolverá sus dificultades, pero es importante que sepamos que esta forma de un mundo en red coincide perfectamente, creo, con la imagen en red de nuestro cerebro y del funcionamiento de nuestro cerebro.

Pienso que esta imagen potente también puede resultar adecuada para la escuela, para su funcionamiento, su organización, su logística, para donde la educación, la pedagogía, la didáctica, el aprendizaje, el saber puedan cobrar una forma de red, con una posibilidad recíproca de contagios, de interacciones.”

 

Un mundo hecho en red

Y dentro de esta red tienen lugar migraciones, emigraciones, desplazamientos, cambios de costumbres, cambios de lenguaje; intenten pensar en todo lo que tiene lugar a día de hoy, en lo que sucederá en los próximos años quizás para entender que se trata de una imagen potente que hay que retener, es una imagen potente porque la podemos trasladar a muchos otros campos, la podemos trasladar al campo del imaginario, al plano del conocimiento científico, al plano de la pedagogía, al plano de la cultura.

Malaguzzi piensa en la escuela como un organismo que podrá vivir una renovación sólo si existe una trama entre contexto y conciencia y conocimiento: anticipaba conceptos de red de contagio, de interacción muy actuales para los años 90; en la actualidad reviste gran interés lo que es el concepto de la mente de los niños, el avance de las neurociencias que arrojan una visión compleja e integrada de la mente de un ser humano, una visión de expresó a través de su teoría de los 100 lenguajes.

Malaguzzi reconoce a todos los sujetos la libertad y la legitimidad de poder aprender dentro de las diferencias con múltiples accesos al mundo y al conocimiento.

Actualmente en las escuelas de Reggio Emilia se intenta trabajar ese reto de proyectar todos esos lenguajes, buscando la modalidad en los contextos, la multimodalidad en los lenguajes.

 

Conceptos para reflexionar sobre el pensamiento de Malaguzzi:

– Derecho a tener derechos desde una visión ecológica del ser humano, el derecho a la subje- tividad.
– Derecho a la investigación y la interdepen- dencia entre la teoría y la práctica en los contex- tos educativos.

– Derecho a la participación de los sujetos que están implicados en la relación educativa.
– Derecho a la belleza: apreciar los aspectos desde diferentes puntos de vista.

– Compromiso ético y moral de privilegiar a los derechos por encima de todo.

La teoría de los 100 lenguajes

Es una teoría social, crítica, psicológica y pedagógica; una teoría que Loris Malaguzzi estuvo elaborando desde los años 70, un momento de gran inspiración cultural, de renovación de las instituciones culturales, sociales, educativas.

Esta teoría propone superar lo que es la supremacía de la palabra, sobre todo para aquellas personas de clases más desfavorecidas, para dar a todos la posibilidad y la dignidad de aprender a todos los sujetos, reconociendo a todos los sujetos la libertad y la legitimidad de la diferencia; por esto, Loris Malaguzzi habla de accesos múltiples plurales al mundo y al conocimiento.

Los lenguajes representan un manifiesto con matices culturales, políticos, educativos, al cual intentamos seguir interpretando en todos los contextos de aprendizaje para niños y adultos.

“..otro problema que tenemos de inmediato es el de procurar que los niños, por cuán difícil pueda resultar actualmente, tengan la posibilidad de ver más allá de la calle, más allá de la ventana, más allá del camino y ver el futuro. Sin futuro no se puede alimentar ninguna esperanza y esto los niños lo saben. Necesitamos creer ante todo que los niños son capaces de hacer muchas cosas.

Nosotros decimos que los niños tienen cien lenguajes, hace falta, pues, que la maestra tenga al menos cien lenguajes, hace falta que el espacio donde vivimos tenga cien lenguajes; y hace falta que estos lenguajes atraviesen las paredes, las casas, las familias de los niños.

Podemos pensar en una especie de gran laboratorio ideal que contribuya a la construcción de un gran contexto que abrace toda la escuela, más los ámbitos familiares y quizás llegando al territorio del pueblo, de la ciudad.

Procuren que las instituciones culturales de la ciudad estén hechas para los niños. Procuren que la ciudad también sea una ciudad que se acuerda de los niños.”

Desde su pensamiento, Loris empuja a construir un futuro con los niños dándoles toda la confianza, colocándolos en el centro, en el corazón de los que se hace, con ando en la capacidad que tienen de hacer muchas cosas; y es aquí donde el educador se debe plantear cómo prepararse para ayudarlos a avanzar en sus competencias a través de los aprendizajes.

Cuando habla de los cien lenguajes de los niños, hace referencia a los cien lenguajes del entorno, otorgándole la responsabilidad a los educado- res de formarse como adultos cultos, capaces de elaborar, proyectar y seguir investigando y seguir empujando siempre hacia adelante. Es muy importante tener una estrategia, intentar dar una organización coherente con los procesos de aprendizaje con los niños. Loris tuvo la intención que la ciudad reconozca a las instituciones y a los niños ya que considera que estas tres dimensiones -los niños, el aprendizaje y el contexto- van siempre de la mano.

La investigación es la manera natural e innata que tiene el ser humano de llegar al conocimiento; es un derecho vital, es la naturaleza del ser humano este impulso por conocer aquello que es desconocido, aquello que es nuevo. Garantizar el derecho a la investigación es una decisión ética y política.

La investigación supone un impulso a todas las potencialidades de futuro con todas estas potencialidades; la investigación como fuente renovable de asombro y maravilla para satisfacer y dar derecho a la vida, a la belleza, a la atención y al cuidado.

“Siempre hace falta un golfo… para los hombres, para los niños, para las mujeres: un lugar resguardado, un lugar más silencioso, un lugar donde poder pensar más y mejor.

Y, ¿qué haremos todos en ese golfo?

Pensaremos entre todos en lo que hemos hecho y lo que no, para nosotros y para los niños, intentaremos entender las razones por las cuales un fenómeno de este tipo no solo está a nuestras espaldas sino también, y todavía, ante nosotros.

Pensar que más que una nostalgia del ayer más bien hará falta una nostalgia del futuro…
Los niños, los que hay y los que vendrán, nos aguardan allí donde pueda llegar la nostalgia del futuro…”.

¿Por qué una mesa de luz?

Prof. María  Cristina Grillo

Seguro que has visto alguna vez una mesa de luz y te has preguntado ¿para qué sirve realmente?

¿Es Importante que los niños tengan una mesa de luz en la sala? ¿Qué se necesita para jugar en una mesa de luz?

¿Qué ES UNA MESA DE LUZ?

En pocas palabras, una mesa de luz es una tabla que se ilumina con luz. La mesa de luz es una herramienta educativa y lúdica esencial para los niños pequeños que ofrece multitud de posibilidades

Consta mesa de luz no hay reglas, todo es libre, la actividad que realizamos sobre ella es expresión artística, experiencias sensoriales, creatividad, imaginación, y a través de todo esto no solo conocemos  propiedades de los materiales empleados, sino que también trabajamos la lógico-matemática sin que los niños se den cuenta.

Una mesa de luz es mirada por los pequeños como un juguete, no como un elemento educativo, lo que hace aún más interesante verlos aprender mientras disfrutan y se divierten.

Con la mesa de luz aplicamos la coordinación óculo-manual, necesaria para manejar y explorar objetos con un grado de precisión cada vez mayor en la realización de las actividades de representación gráfica en la mesa de luz.

Interpretamos y producimos imágenes como una forma de comunicación y disfrute, descubriendo e identificando los elementos básicos del lenguaje plástico.

Apreciamos las producciones propias y ajenas atribuyendo poco a poco significado.

Valoramos las posibilidades de cada uno, utilizando una nueva forma de expresión y representación que reflejen situaciones reales o imaginarias.

Conocemos distintos materiales naturales, atributos físicos y creamos composiciones libres y artísticas, que nos ayudan a aprender, relajarnos, jugar, componer, crear, investigar, descubrir, soñar, admirar.

En resumen podemos decir que la mesa de luz y todo lo que se puede realizar con ella, es una gran experiencia visual sensorial para los niños que estudian los diferentes objetos que ponen en la mesa y cómo se ven cuando son iluminados.

Puedes encontrar una gran variedad de formas, tamaños y calidades que van desde cajas de luz de plástico, cajones de madera o mesas más sofisticadas con luces de leds, mira algunas de las propuestas de jugar y jugar.

¿De dónde vienen las mesas de luz?

Las mesas de luz y todos los espacios multisensoriales (hay escuelas que tienen incluso un ambiente a oscuras donde hay muchos elementos luminosos para interactuar) están inspirados en el enfoque pedagógico Reggio Emilia y se pueden utilizar desde los 18 meses en adelante

La perspectiva Reggio Emilia como una pedagogía innovadora e inspiradora para la educación del Nivel inicial que valora al niño/a como fuerte, capaz y flexible. Como ya sabemos el niño trae consigo un gran potencial y una curiosidad innata que le lleva a desarrollar un profundo interés por descubrir el mundo y su lugar en él. Por eso consideran que los niños son capaces de construir su propio aprendizaje si tienen las herramientas y el ambiente adecuado.

Es importante recordar que el enfoque Reggio Emilia no es un método. No existe una

formación específica que te forme para ser un maestro/a de Reggio Emilia.

¿Por qué una mesa de luz?

Hay tantos beneficios del juego de luz que no sé por dónde empezar.

A menudo, las mesas de luz se asocian como un excelente recurso para la ciencia, la exploraci6n y el descubrimiento (que sin duda lo son), sin embargo, las mesas de luz son mucho más que eso!

Se pueden utilizar para la integración sensorial. Para la observación, la atención y el aprendizaje académico como la lectoescritura, lenguaje, matemáticas, música, y ciencias.

Las mesas de luz permiten crear un espacio de aprendizaje atractivo y acogedor que anima a los niños a participar en actividades de aprendizaje a través del juego sin que ni siquiera se den cuenta.

Son una excelente fuente de información multisensorial, donde la vía visual cobra especial protagonismo. Los niños se sienten atraídos naturalmente hacia la luz del panel y, a menudo se calman con la estimulación visual mientras exploran un objeto. Por eso se dice que son un maravilloso recurso para niños diagnosticados de TDAH por ejemplo.

Los mejores materiales para la mesa de luz

Tenemos nuestro cajón de luz desde hace algo más de dos años, por lo que hemos ido probando muchísimos  materiales en él. La mesa de luz ofrece infinitas posibilidades para jugar y aprender con casi cualquier material, muchos los encontramos fácilmente en casa: pintura, arena, elementos de la naturaleza (observar los nervios de una hoja con la mesa de luz es una experiencia muy chula, por ejemplo}, gelatina, papel de celofán…

LAS SEMIESFERAS DE PERCEPCION

Estas semiesferas de material acrílico fascinan, se juega muchísimo con ellas en la mesa de luz y fuera de ella (incluso en la bañera). Además al juntarlas cambian de color, y tienen un efecto lupa que le gusta mucho. Estas semiesferas son ideales también para una panera de los tesoros para bebés

LOS DISCOS DE COLORES

Estas piececitas de colores a ¡Gustan especialmente para hacer dibujos en la mesa de luz, también los usa para contar y clasificar. Otras veces se convierten en monedas cuando juega a crear una tienda en su habitación.

BLOQUES DE CONSTRUCCIÓN TRANSPARENTES DE COLORES

Le encantan, son de 5 colores y 5 formas diferentes y como Juego de construcción, experimentando con la transparencia, la luz, el reflejo.. son geniales.

El curioso diseño de las piezas con las ranuras permite hacer construcciones muy curiosas, para conseguir nuevos colores superponiéndolos.

LAS FORMAS GEOMÉTRICAS DE ACRÍLICO BÁSICAS

Con diferentes colores son también un imprescindible, permiten superponerlas fácilmente y experimentar con las mezclas de los colores. Sunflower los utiliza mucho como bases para sus construcciones, y en juego simbólico como bandejas y platos. Además tienen un orificio que te permite colgarlas y experimentar con la luz y las sombras al lado de una ventana.

Esta pirámides del Arco iris de madera con la base en acrílico y diferentes colores es otro de los materiales que incluye sus juegos en la mesa de luz. Gusta utilizar sus elementos como recipientes e introducir dentro otros materiales que a la vez cambian de color.

A mí personalmente me parece uno de esos elementos de juego sencillos que ofrecen tantos aportes para un amplio rango de edades (desde bebés hasta finales de la primaria) que los recomiendo mucho.

Los BLOQUES SENSORIALES son estructuras de madera que dentro tienen diferentes materiales:

bolitas, líquidos, arena… Y crean efectos espectaculares para jugar con ellos en la alfombra haciendo sus construcciones, y aunque no los utiliza tanto en la mesa de luz, su efecto es también sorprendente.

Espero que te animes a crear una mesa o cajón de luz para tus pequeños y ya verás cómo es un espacio que ofrece muchísimas horas de descubrimientos y aprendizajes.

El niño tiene cien lenguajes, cien manos, cien pensamientos, cien formas de pensar, de jugar y de hablar, cien siempre, cien formas de escuchar, de sorprender, de amar, cien  alegrías para cantar y entender. — Loris Malaguzzi


 

ACTIVIDADES PARA LA MESA DE LUZ

Todos sabemos lo útil y atractiva que es una mesa/caja de luz. Pero una de las mayores dudas es si le vamos a sacar realmente provecho.

» Juego de siluetas con las  plantillas: vehículos, mariposas, estrellas, animales, el tiempo… Para que lo crees en separadores de colores o cartulina negra.

» Pintar utilizando diversos métodos con la mesa forrada con papel film  bien sea con témperas, tiza líquida, con esponjas cortadas con formas, a soplidos a través de una pajita, rollos de papel higiénico doblados para hacer formas geométricas..

» Contar cuentos

» Usar las bolsas de cierre hermético tipo zip y rellenarlas de pintura con purpurina; masas sensoriales con espuma de afeitar y colorante; con aceites de bebé y estrellitas que floten; con pintura y letras para que las muevan y formen su nombre o palabras

»  Estampar huellas, sellos, esponjas…

»  Rodar canicas a soplidos. Y si ponemos pintura para que dejen el rastro ya es actividad top

» Examinar animales u hojas plastificadas con una lupa

» Laboratorio casero: vasos, agua teñida y pipetas para mezclar colores y trasvasar creando nuevos colores a raíz de los primarios. Ya nivel máximo si tenemos un set de probetas

» Jugar con cubitos de hielo teñidos y pinzas

» Dibujar el contorno de objetos. Nuestra mano en la luz con tiza líquida (o rotus de pizarra blanca) es un recurso brillante que no falla

» Jugar con espuma de afeitar en una bandeja grande transparente

» Minimundos con animales plastilina, césped artificial, arena con pan rallado

» Crear nieve casera con harina

» Bandeja sensorial con arroz teñido, un mundo multicolor para usar cucharas, embudos

» Bandeja de trazo transparente para hacer trazos libres o fijándose en tarjetas de letras sobre arena coloreada, sémola, harina, sal

» Jugar con bolas de hidrogel y clasificarlas en vasos/cuencos/platos de colores.

» Ciencia casera con experimentos como los volcanes donde mezclamos bicarbonato, jabón líquido y vinagre

» Formas geométricas con separadores de colores

» Letras y números en papel de acetato.

» Trabajar las emociones y las partes del rostro dibujando en  transparente y añadiendo la boca, ojos.

« En una bandeja lleva de harina o bolitas de gel, encontrar los objetos perdidos como letras o mini cuentas

» Mandalas para adornar con discos, piedras de cristal…

» Popurrí de colores y formas para  clasificar, libertad creativa

» Rectángulos de separadores de colores para emparejar con pinzas de tender ropa. Si son transparentes de colores mucho mejor en vez de las clásicas de madera.

» Construcciones con bloques traslúcidos y arcoiris, bloques apilables

» Circuitos de coches para que la diversión venga rodada y si son estos translucidos

» Hacer seriaciones con cualquiera de los materiales traslúcidos Clasificar por colores un conjunto de objetos

» Juego de continua la historia según el emoji que te toque al ir cogiendo al azar

» Crear un arcoíris con los círculos translúcidos de colores

» Crear nuestras propias vidriera con cartulina negra y papel celofán en cada hueco

» Rollos de papel higiénico rellenos de brillantina y cerrados con papel celofán de colores distintos o transparente

» Trabajar las letras colocando encima de su trazo contadores

» Crear el mapa mundi azul y de colores los continentes y colocarlos sobre separador azul

» Hacer juegos de simetrías con espejo como con bloques lógicos transparentes

» Puzzles creados en separadores de colores con imágenes dibujadas y cortados en varias piezas

» En piezas antideslizantes de bañera colocar canicas o perlas de hidrogel en cada ventosa

» Botellas sensoriales de agua de colores

« Teatro de sombras con cartulina negra y palitos de brochetas para mover

» Crear palabras y frases con el abecedario traslúcido